Saltar al contenido

Más UE

02/04/2020

Los europeos llevamos semanas encerrados en casa. No hace falta que explique por qué. Todos lo sabemos. Pero en este período no han faltado voces que dan por muerta a la UE. ¿La razón? Que no ha actuado, que las decisiones han sido nacionales, que como siempre llega tarde, y que además es insolidaria. Hay verdades en estas afirmaciones, pero también hay que decir que han sido precisamente algunos gobiernos de los Estados miembros los que han tratado de liarla, no es la primera vez, y no las instituciones comunitarias.

Desde que el COVID-19 entró en Europa estamos siendo los países mediterráneos los más afectados, sobre todo Italia y España.  Desde ese momento, los gobiernos italianos y español comienzan a mirar a Bruselas en busca de ayuda. No es un problema italiano o español, es un problema europeo. En España cabría recordar que los primeros casos reportados son unos turistas alemanes en La Gomera.

La respuesta, una vez más, es cierto, no es rápida, pero cuando se da es la apropiada. El BCE primero dubitativo, rectifica y dice que no faltarán instrumentos  financieros de ayuda. El Parlamento Europeo aprueba por casi unanimidad unimidad una Resolución en la que reclama más solidaridad y una ayuda de 37.000 mil millones (4.145 para España) y un Fondo de Solidaridad de 800 millones. Y, ayer mismo, la Comisión Europea aprobó una serie de medidas de solidaridad para la lucha contra el desempleo que se concretan en 100.000 millones de euros.

¿Dónde ha estado el problema este fin de semana? A mi juicio, no en las insttuciones europeas, sino en la visión miope de los gobiernos de los Estados miembros en el Consejo Europeo, esa institución donde se sientan los Jefes de Estado y de Gobierno de los 27, donde lo que prima no es Europa, sino la visión rácana, cortoplacista y, en muchos casos egoísta, sectaria y partidista de los gobiernos. No podemos culpar a los ciudadanos de esos países, más allá de la responsabilidad por votar a esos partidos, por que lo que allí se discute, es el qué hay de lo mío.

Es precisamente la visión nacional, la que impide tomar medidas coordinadas. No ha fallado la UE. Han fallado algunos gobiernos de derechas de Estados miembros de la UE.

Por eso, una vez más desde estas páginas apelo a una mayor integración europea, a ir quitando competencias al Consejo y dotar a las instituciones comunes de mayor autonomía.  En definitiva, MÁS EUROPA.

Cuidaros. Y quedaros en casa.

Este post se ha escrito escuchando Gong en Sherwood Forest (1975)

 

From → UE

Deja un comentario

Deja un comentario